Lo que necesitas saber de cada signo del zodiaco.

Pactos angélicos

Todos podemos comunicarnos con los ángeles, y de hecho lo hacemos muchas veces sin ser conscientes de ello. El contacto se puede establecer por distintas vías. A veces ante un problema determinado, escuchamos una voz interior que nos indica el camino a seguir, otras resolvemos nuestros conflictos por azar, leemos la frase que necesitábamos en el momento exacto en un libro o diario, o la escuchamos de boca de un amigo, en un contestador automático, o en la televisión. Todos estos mensajes que nos llegan en el momento justo, proceden de los ángeles.

Pero el contacto con los ángeles también puede establecerse por propia voluntad, si poseemos los conocimientos necesarios para hacerlo.

En este artículo, te enseñaremos a buscar la protección y el consejo de los ángeles por medio de pactos rituales.

¿Cuándo y para qué invocarlos?

Puedes invocar a tu ángel cuando tengas un problema económico, cuando quieras preservar tu salud o la de tus seres queridos, cuando necesites protección para llevar a cabo alguna actividad, trabajo o exámen. Cuando necesites mejorar tus relaciones amorosas o familiares, etc.
Podrás pactar con tu ángel siempre que lo necesites, si así lo deseas, incluso varias veces al día, pero debes tener en cuenta que los pactos angélicos exigen el cumplimiento de ciertas reglas. Esto significa que hay exigencias específicas para cada tipo de pacto.
Un pacto implica un acuerdo entre dos partes, que ambas deberán respetar indefectiblemente. No es solamente un pedido de ayuda o un llamado de misericordia a un ser supremo, sino que exige algo a cambio.

En otros tiempos, realizar un pacto con el diablo aseguraba fortuna, poder, o juventud eterna, pero también implicaba “vender el alma” Es decir, había una ganancia, pero a un costo demasiado alto.. En el caso de los ángeles, seres de luz, sus exigencias son espirituales, pero exigencias al fin, e implica un gran esfuerzo por nuestra parte cumplir con ellas.

Cuando hacemos un pacto angélico, lo que ponemos en juego son nuestras debilidades, nuestros defectos, nuestro Talón de Aquiles. Esta faceta, la más vulnerable reconocida a nivel interno, la tenemos que exponer abiertamente ante el ángel elegido durante el ritual de pacto. Seguidamente, debemos proponernos con toda sinceridad, y con mucha fe, que nos esforzaremos en vencerla, transformando el defecto en virtud, la debilidad en fortaleza. Esto significa un notable esfuerzo, constante y reiterado, por superarnos, que no debemos olvidar. Ya que muchas veces, una vez conseguido el objetivo (gracias a la ayuda del ángel), tendemos a bajar la guardia, o a olvidar nuestra promesa.
Recuérdalo, porque una vez realizado el pacto, el ángel lo cumplirá, pero usted también deberá cumplir con lo prometido. De lo contrario, el acuerdo quedará roto, y nunca más podrá volver a invocar la ayuda de los ángeles.

UN ÁNGEL PARA CADA PACTO:

Aunque todos los ángeles ejercen una función protectora sobre los diversos aspectos de nuestra vida, cada uno de ellos posee cualidades especiales sobre una faceta determinada. Por ello, dependiendo de cuál sea su problema específico, deberá pactar con un ángel determinado. A continuación, vamos a detallar en una lista, los ángeles que puedes invocar para objetivos específicos.

  •  Para mantener o mejorar la salud: Mikael, Nenamiah, Habuiah.
  •  Para solucionar problemas económicos: Hayel, Haiaiel, Reyel.
  •  Para conseguir trabajo: Vasahiah, Leratel, Achaiah.
  •  Para recibir protección ante una empresa difícil: Anauel, Mihaell, Harahell.
  •  Para solucionar problemas amorosos: Daniel, Nitahel, Aniel.
  •  Para mejorar las relaciones sexuales: Anahuel, Mihael, Haraellh.
  •  Para lograr la armonía familiar: Rehael, Sealiah, Menadel.
  •  Para conseguir paz espiritual: Leuviah, Mahasiah, Haaiah.

En el próximo artículo, revelaremos las indicaciones detalladas a seguir para invocar la presencia angelical y para realizar el ritual de pacto.


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